EJEMPLO DE TEXTO ARGUMENTATIVO:
En la actualidad, las fake news
o noticias falsas se han convertido en un grave problema que afecta a la
sociedad en su conjunto. Este tipo de información falsa o engañosa se crea,
presenta y divulga para desvirtuar la realidad casi siempre con fines
lucrativos o para engañar deliberadamente a la población y puede causar un
perjuicio público en diversos ámbitos, desde amenazas a los procesos electorales
hasta la salud pública o la seguridad ciudadana.
Uno de los principales factores
que han posibilitado el auge de la desinformación son las redes sociales. Su
producción es de bajo costo y facilitan la difusión de contenidos de manera
masiva, rápida y sencilla, lo que lleva a que los usuarios transmitan las
noticias sin pasar por un protocolo de verificación. Esto se debe a que
tendemos a asumir la veracidad de la información porque proviene de un amigo o
porque el contenido parece tener una capa de veracidad.
Para combatir la desinformación,
es esencial comenzar desde edades tempranas, acompañando a los niños y jóvenes
en el proceso de aprendizaje digital y enseñándoles a localizar fuentes seguras
y fiables de información. También es fundamental fomentar valores sociales positivos
como la asertividad, la empatía y la tolerancia para que las personas
reaccionen ante la desinformación de manera crítica, reflexiva y prudente. Hay
que recordar que las noticias falsas buscan apelar a nuestras emociones y
confirmación de nuestros sesgos.
Otro aspecto importante es
practicar la paciencia y evitar la impulsividad. La desinformación crea en las
personas la sensación de que es imprescindible compartir la información
rápidamente, para así llegar a muchas personas. Por eso es fundamental promover
el análisis de la información, contrastar los hechos que presenta y verificar
las fuentes.
Contrastar la información es
crucial para comprobar su veracidad, observando si está publicada en sitios de
reconocido prestigio informativo y desconfiando de aquellos medios que parezcan
poco profesionales. Es recomendable apoyarse en páginas web especializadas en
verificación de información.
Por último, es importante no
compartir la desinformación en línea y eliminarla del dispositivo, evitando su
difusión descontrolada. Rompiendo la cadena, estamos impidiendo que otras
personas reciban la información falsa o errónea.
En conclusión, la desinformación puede
generar un gran perjuicio público en diversos ámbitos. Para combatirla, es
fundamental enseñar a las personas a valorar diferentes puntos de vista,
localizar fuentes seguras y fiables de información, solo así podremos
garantizar una sociedad informada y crítica ante los peligros de la
desinformación.