Práctica de
comprensión lectora: leemos un texto sobre LA
COMUNICACIÓN MANIPULADORA
LECTURA:
¿Qué es la comunicación manipuladora?
Si pensamos en la comunicación
como en el arte de crear vínculos, de generar proximidad, percibiremos que la
comunicación requiere algún tipo de apertura recíproca, la cual implica algún
grado de confianza, en uno mismo y en el otro. Como iremos viendo, confianza y
reciprocidad son dos de las cualidades ausentes en una comunicación
manipuladora, a pesar de que quien manipula, y a veces también quien está
siendo manipulado, insista en hacernos creer todo lo contrario.
En una comunicación auténtica,
los interlocutores se interesan por crear un espacio de seguridad mutua en el
que puedan plantear las diferencias con respeto, es decir, tratando de no
dañarse el uno al otro; están atentos a detectar y aclarar los malentendidos
que en algún momento se producen, para lo cual tratan de expresar claramente lo
que piensan y lo que sienten, y lo reformulan tantas veces como sea necesario
para asegurarse de que ambos están hablando de lo mismo; preguntan y responden
con claridad; están atentos a cualquier señal de resquebrajamiento de la unión
comunicativa, y por todo ello se esfuerzan sobremanera en escuchar -que no es
lo mismo que callar mientras otro habla—, escuchando con toda la mente y con
todo el cuerpo. Un acto de auténtica comunicación es comparable a un acto de
amor, en el que se goza al dar y recibir con respeto mutuo y con reciprocidad.
La comunicación manipuladora, en
cambio, no se interesa en dar, ni tampoco en recibir, ni mucho menos en la
reciprocidad o en la simetría del poder. La comunicación manipuladora goza en
el hecho de imponer y de tomar por la fuerza algo que el interlocutor
probablemente no haría o no daría por sí mismo, o, en el mejor de los casos, el
goce está en arrebatárselo antes de que haya decidido darlo, lo cual nada tiene
que ver con el hecho de recibir, que implica abrirse a aceptar la voluntad del
otro. La comunicación manipuladora, por el contrario, tiene que ver con imponer
un desequilibrio de poder, con dominar, con hacer trampa y robar. Por todo
ello, podríamos decir, en cierto modo, que la comunicación manipuladora no es
verdadera comunicación (en el sentido relacional de comunión), sino
anticomunicación.
Y ¿cómo se consigue perpetrar el
«robo» deseado? Se consigue introduciendo perturbaciones específicas en la
comunicación que infunden confusión, culpa, miedo o vergüenza en el
interlocutor, y se aprovechan esos momentos de confusión o malestar inducido
para perpetrar el delito.
Estas perturbaciones se pueden
llevar a cabo a través de la comunicación verbal, de la no verbal, o de la
incongruencia entre ambas. Unas y otras dejan, aun en plena fase de confusión,
el regusto inquietante de que «algo» anda mal. Es común la sensación de
disonancia entre lo que dicen las palabras y lo que expresa el cuerpo o el
comportamiento. Detectar ese «algo» que desafina y anda mal, y hacerlo lo antes
posible es crucial para frenar el daño y para reanudar la tarea de la
comunicación auténtica cuando todavía es posible, y se desea -por lo menos en
los terrenos en donde todavía sea factible-, y, si ya no hay restablecimiento
posible, para disponernos a cumplir con el deber, difícil, complejo y a menudo
doloroso, de cortar la relación con el manipulador-abusador. Pero no vayamos
tan deprisa. Hay mucho que hacer primero. Y hay que hacerlo bien. Para ello
vamos a empezar por ir afinando nuestra capacidad para detectar la manipulación.
Tomo prestadas de Isabelle
Nazare-Aga (2004, p.85) algunas frases perfectamente ilustrativas de cómo
percibimos la comunicación con un manipulador: «Sólo con él (o ella) tengo
problemas de comunicación»; «nunca te aclara nada, tienes que adivinarle el
pensamiento»; «saca las cosas de quicio y tergiversa las palabras... Es muy
desestabilizador. No sé qué gana con actuar así»; «desvía el tema de su
verdadero propósito y después quiere hacerte creer que eres tú quien lo enredas
todo».
Tratar de comunicarse con una
persona manipuladora es un esfuerzo arduo e inquietante, y nos deja con la
sensación amarga de que, hagamos lo que hagamos, verdaderamente no podemos
comunicarnos con ella. Aunque quizá no lo parezca, quien está acostumbrado a
manipular es un virtuoso en el arte de distanciarse y escapar, como haría un
eterno fugitivo. La comunicación manipuladora es siempre retorcida. No es una
comunicación franca, abierta ni directa. A menudo es contradictoria y comparte
muchas de las características básicas de la comunicación perversa, al hacer
aparecer como comunicación lo que en realidad es un comportamiento destinado a
mantener bajo control y bloqueado el flujo comunicativo.
Extraído de: La
manipulación. La perversidad del pequeño poder. Núria Mata
1. ¿Qué se infiere por apertura recíproca?
A.
Que ambos interlocutores tengan interés
por comunicarse unos a otros
B.
Que se tenga un tema del cual hablar
C.
Que exista una vinculación en el
lenguaje común de los interlocutores
D.
Que haya una facilitación de la
proximidad
2. Una de las cualidades de la comunicación,
necesariamente es:
A.
La fiabilidad del mensaje
B.
La confianza
C.
La contrastación de la información
D.
La capacidad para escuchar al otro
3. En una comunicación auténtica:
A.
Se plantea una interacción recíproca
B.
Se genera un mensaje o contenido comunicacional
C.
Se expresa una serie de información que
intenta llegar al otro
D.
Se intenta generar un espacio de
seguridad
4. Entre el párrafo 2 y 3 se presenta:
A.
Un contraste
B.
Una definición
C.
Una serie de aclaraciones
D.
Una ejemplificación
5. ¿Por qué "Un acto de auténtica
comunicación es comparable a un acto de amor, en el que se goza al dar y
recibir con respeto mutuo y con reciprocidad"?
6. La palabra «simetría» en el texto
tendría el significado contextual de:
A.
Particularidad
B. Confianza
C. Igualdad
D. Belleza
7. La comunicación manipuladora,
principalmente,
A.
Goza al dominar al otro y hacer que este
haga lo que se desea
B.
Intenta construir un hecho frustrante
C.
Se comunica de manera entrelazada y
oscura
D.
Vive en un estado total de afectividad
8. La manipulación, se relaciona
principalmente con:
A.
Expresar
B.
Imponer
C.
Recibir
D.
Intervenir
9. El «robo» se refiere a:
A.
Un tipo de delito
B.
La necesidad de hacer que el otro se
comunique conmigo
C.
Entablar una relación de comunicación
conflictiva
D.
El acto de manipular
10. La característica principal de un acto
de comunicación manipuladora es:
A.
Aprovechar la confusión
B.
Interpretar los sentimientos del otro
C.
Imponer una manera atractiva de pensar
D.
Ofrecer un tipo de ideología de
convencimiento
SOLUCIÓN:
1A
2B
3D
4A
5.-Porque
la comunicación auténtica busca la confianza y el no hacer daño, sino más bien,
el construir, el respecto, por ende, el amor.
6C
7A
8B
9D
10A
APRENDE MÁS SOBRE COMPRENSIÓN LECTORA CON ESTE VIDEO:
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